Propuesta de las Marchas Europeas contra el paro, la precariedad y la exclusión

Hacia una Europa de los derechos sociales

En el continente más rico del planeta, a un habitante de cada tres de la UE le toca vivir en la probreza y la precariedad, porque tiene acceso a los derechos fundamentales al trabajo, al ingreso, a la vivienda.

Esos derechos fundamentales nos serán reconocidos en la futura Constitución europea. A no ser que actuemos.

De hecho, decidida en la Cumbre europea de Laeken-Bruselas, en diciembre 2001, la Convención europea prepara la futura Constitución europea. Terminará su trabajo en marzo 2003. Luego, los gobiernos europeos decidirán, en las cumbres europeas de Thessaloniki (junio 2003) y de Roma (diciembre 2003).

El preámbulo de esta Constitución será la Carta de los derechos fundamentales, adoptada en la Cumbre de Niza (diciembre 2000). Ya en Niza, manifestamos para gritar nuestro rechazo de une Carta qui rehusa reconocer nuestro derecho a un empleo, al ingreso, a la vivienda. Hoy, la Convención y luego los gobiernos se preparan a integrar esta Carta tal cómo está, sin los derechos sociales, en la futura Constitución europea.

Eso es inaceptable

Un proceso constitucional carece de qualquier legitimidad si no abre un debate real con el conjunto de los pueblos sobre los derechos que conciernen la existencia cuotidiana de la gente.

En el momento que la Unión europea está a punto de oficializar, en un texte con valor constitucional, el no-reconocimiento de los derechos sociales, es imprescindible luchar. Esta lucha, empezada en las calles de Niza, debe continuar hoy.

Reivindicamos estos derechos como derechos que la sociedad tiene que garantizar a cada individuo que vive en su territorio. Rechazamos una Europa que ne esté capaz, en derecho y en hecho, de garantizar al conjunto de sus habitandes estos derechos sociales elementales.

No al dumping social, sí a la convergencia social por arriba : cualquier derecho adquirido en un país de la Union europea debe ser considerado como un seuil debajo del cual no se puede bajar.

Tenemos la obligación, todos juntos, en el conjunto del continente, de defender los derechos sociales identificados al "modelo social europeo" : un fracaso en Europa no haría sinó acelerar la espiral del dumping social y el nivel del appauvrissement al nivel del planeta.

Nos movilizamos pues hoy, y nos movilizaremos en Copenhague, en Thessaloniki, en Roma, y en cada sitio donde los decididores europeos se reunirán, para reivindicar nuestros derechos sociales, sin discriminación de edad, de sexo o de origen, para todos los habitantes de nuestro continente :

• Para el derecho a un ingreso garantizado individual que permita a todos de vivir en la dignidad;
• Para el derecho al empleo, libramente elegido; contra cualquier medida de trabajo forzado o impuesto.
• Para el derecho a un empleo decente : contra todas las formas de precarización de los estatutos y de los ingresos, contra el tiempo partido impuesto, contra el trabajo precario;
• Para el derecho a una atención sanitaria de calidad para todos y todas.
• Par el derecho a la vivienda.
• Para el derecho a la educación, a la cultura y a la formación elegida.
• Para el derecho al transporte y a todos los medios de comunicación
• Para el derecho a la energia, a la electricidad, al agua, al gaz;
• Para los derechos a prestación en caso de paro, de enfermedad, y para el derecho a la jubilación;
• Papeles para todos y todas.

Los movimientos que apoyan este llamamento se comprometen a llevar juntos a cabo las distinctas movilizaciones que se estan preparando para imponer estos derechos.